The Blue Peter Hotel

La noche que dormimos en Cape Town, nos quedamos en el Blue Peter, un pequeño hotel en la zona de Bloubergstrand.

Me recomendaron tanto la zona como el hotel que fue un capricho y, sinceramente, no me arrepentí de ninguna de las dos opciones. Lo que sí que me dio pena fue no poder aprovechar un poco más del hotel y ver amanecer desde la habitación ya que tenía que coger un vuelo a las 7 de la mañana.

La zona de Bloubergstrand es una zona residencial al norte de la ciudad. Creo que una de las razones por la que me gustó tanto es porque se respira un aire de veraneo, aunque sea un sitio en el que la gente vive todo el año y especialmente por las vistas que tienes de la table mountain, creo que no hay mejor sitio para poder verla en toda su magnitud.

El Blue Peter esta en primera línea de playa, capricho que nos pudimos permitir porque era temporada baja que sino nada de nada. El hotel en sí no es nada espectacular, es pequeño y las habitaciones desde mi punto de vista están un poco anticuadas, pero la gracia está en su ubicación, primerísima línea de playa y con vistas a Roben Island, así como por su valor sentimental, ya que es una institución en la zona.

La habitación era la típica de hotel de playa, con un pequeño saloncito y un minúsculo balcón con vistas a la Table Mountain.

Las vistas desde la cama eran para morirse.

El baño no muy moderno pero limpio.

Al Blue Peter es a dónde acude gente de todas las edades y todos los tipos a ver las puestas de sol. Nosotros no fuimos menos y bajamos también a disfrutar del espectáculo cerve en mano.

Tuvimos la grandísima suerte de disfrutar de un día impresionante, el primero en varias semanas por lo que el ambiente estaba asegurado. El sitio estaba a tope y tenían incluso grupo de música amenizando la tarde.

Sitio en el que sentarte como una persona “normal” no hay mucho, pero tienes algo de “prao” en el que la gente no tiene ningún reparo en sentarse a disfrutar de su cerveza, las vistas de la “table mountain” y la puesta de sol.

El hotel cuenta con un restaurante bastante elegante que tiene vistas sobre la playa, 

pero a su vez cuenta con un bar más relajado, el Lower Deck, que es el que atiende la terraza y en el que se pueden pedir pizzas, por lo que el plan cerve + pizza + puesta de sol es lo más de lo más.

Por desgracia nos fuimos muy temprano por la mañana, por lo que no pudimos disfrutar del amanecer ni del desayuno, aunque tuvieron la gentileza de prepararnos un desayuno para llevar, con sus sándwiches, sus galletas, zumo, yogurt, fruta, refresco…… muy completo.

Tengo que decir que ni yo tengo clara mi opinión sobre el Blue Peter. Como lugar para ir a tomar algo y ver la puesta de sol 100% recomendable, como lugar para alojarse, creo que no vale los 1.700 ZAR que cuesta la habitación con vistas al mar.