Closed for Holiday

No sabéis la satisfacción que me da el post de hoy y es que, por fin, ha llegado el día de coger mi adorado Airbus 380 caminito de España. Por delante me esperan 30 horas de viaje, pero ya sabéis lo que se dice, nunca es largo el camino que te lleva de vuelta a casa y mucho menos si esa casa es mi adorada “tierrina”.

Hace ya como un mes empezó a circular por la red un vídeo que aunque, me resulta especialmente triste, me siento muy identificada con él, más aun ahora que toca volver a casa para unas mini-vacaciones. Se llama la sorpresa, os lo dejo para aquellos que aún no lo hayan visto.

http://www.youtube.com/watch?v=qxu5W4bj4I8

Papá, mamá, Moon….. allá voy!

Lo que no me gusta de Sudáfrica

Como era de esperar no todo puede ser maravilloso y vivir en otro país te lleva, tarde o temprano, a descubrir las cosas que no te gustan del mismo. Después de más de dos meses en Sudáfrica, ya puedo hablar de alguna de las cosas que no me gustan del país. La pregunta es ¿por dónde empezar?

Una de las cosas que más me molestan es el tema de los plazos. Siempre que se comprometen a entregarte algo en una fecha tienes que sumarle un mínimo de 10 días y aún así es posible que se retrase. Ya si la persona en cuestión te dice que lo vas a tener en esa fecha 100% olvídate porque nunca llegará.

Otra cosa que me molesta mucho es que cuando llamas a una persona o vas a visitarla, te preguntan lo primero cómo estás y te dan conversación. Una vez que se han puesto al día de tu vida, ya es el momento de que te expliquen lo que quieren, necesitan o que te dejen decirlo a ti, es algo que realmente me desespera!

Lo siguiente creo que sería hablar de los enchufes en el baño, o mejor la ausencia de ellos. Por lo que me han comentado la ley de construcción Sudafricana prohíbe que haya enchufes o interruptores en el baño, para de este modo evitar los incendios, y la pregunta del millón ya no es dónde enchufar el secador o la plancha del pelo, es ¿dónde se supone que tienes que enchufar el cepillo eléctrico? Pues nada lo tengo en la mesita…

Sobre los horarios de las tiendas, no sé ni por dónde empezar. En principio las tiendas abren ininterrumpido de 8 de la mañana a 5 de la tarde y los sábados hasta las 13:30. Los supermercados los hay de todos los gustos, los que cierran a las 5 de la tarde, los que cierran a las 7 y los que cierran a las 8. Una de las cosas que más me han llamado la atención es que en los supers no se vende más alcohol que el vino, el resto (cerveza, licores o alcohol fuerte) tienes que ir a comprarlo a las licorerías que evidentemente no tienen tan buenos horarios. Además aunque los domingos estén abiertos los supermercados, es imposible comprar alcohol, la zona del vino la cierran con una persiana y no se puede comprar nada, nada! Pero eso sí, si vas el domingo a cualquier bar puedes pedir vino, cerveza, copas o cualquier cosa que te apetezca independientemente de los grados de alcohol que tenga. Las razones las hay de todos los gustos. En primer lugar que Sudáfrica es un país muy religioso y por lo tanto el domingo es un día que no se debe beber alcohol. El otro razonamiento, que parece ser el que tiene más peso es que los domingos no se bebe alcohol para que la gente, principalmente negritos, no beban y así se presenten a trabajar el lunes, ya que sino de las borracheras que se agarran, no se presenta nadie a trabajar.

Con esto no me malinterpretéis, no quiero decir que no me guste el país, pero evidentemente no todo puede ser bueno.

Augrabies Falls National Park

Hace un par de fines de semana hice mi primera expedición a un parque natural sudafricano y la verdad es que me ha encantado!

Nos cogimos el 4x4, una nevera bien provista, las botas de caminar y nos fuimos al parque natural de las cataratas Augrabies, que es el que más cerca está de Upington, una hora y media de coche aproximadamente. Aunque el parque se puede ver en un día, especialmente si madrugas, nosotros optamos por hacer un plan de fin de semana.

Reservamos una de las cabañas que hay dentro del parque para dormir. La verdad es que no tenía muy claro lo que nos podíamos esperar pero sinceramente no estaba nada mal. Tenía baño, dos habitaciones con dos camas cada una (habíamos cogido una de las pocas cabañas de dos habitaciones) un salón, una cocina, terracita y braai. La cocina tenía incluso platos vasos y bandejas. Todo por el módico precio de 1.475 ZAR, unos 110 EUR).

Nada más llegar al parque natural en la puerta te dan un papel que tienes que rellenar con la matrícula y el nombre de las personas que hay en el coche. Con ese papel vas a recepción y en caso de que no hicieras el pago por adelantado (se puede hacer online en la página http://www.sanparks.co.za/) pagas la entrada. La de los no residentes es 120 ZAR y la de los residentes 30 ZAR, vale el permiso temporal de residencia. Cuando regularizas la situación en recepción, mismo sitio en el que haces el “check-in” y “check- out” para las cabañas, te dan el mapa y te explican un poco el itinerario, indicándote hasta donde puedes llegar sin necesidad del 4x4.

La zona de la recepción cuenta también con un restaurante, y una tienda de souvenirs que también hace las veces de supermercado, por lo que si te alojas allí y te has olvidado algo, véase la sal en nuestro caso, tienes la oportunidad de comprarlo.

Empezamos la excursión pidiendo unos sándwiches para llegar en el restaurante del parque natural y haciendo la ruta en 4x4. Básicamente esa ruta consiste en recorrer con el coche el parque por una pista de tierra en busca de animales. El itinerario tiene algunas paradas que están señaladas, lo que incluye miradores, abrevaderos, etc. Hacer la ruta entera lleva unas 6 horas, pero como todo depende de la velocidad y de las paradas que hagas. Es recomendable ir temprano o cuando está atardeciendo ya que es cuando menos calor hace y cuando los animales salen a comer. Nosotros empezamos el día sin ver muchos pero a medida que el calor aflojaba la cosa mejoró, springboks; ostrich; orix; impala; jirafas…… Una recomendación, llevar prismáticos y un buen teleobjetivo porque si no vais a ver más bien poco.

Al atardecer y al amanecer el parque natural ofrece visitas guiadas en un autobús, cuestan 150 ZAR pero tiene que haber un número mínimo de personas para poder hacerlas, sé que no eran muchos, pero ahora no recuerdo cuantos. Destacar que el acceso a la zona del parque natural se cierra a una hora determinada, por lo que si no quieres pasar la noche dentro, lo mejor es que lo tengas en cuenta. Ahora que los días son más largos lo cierran a las 7:30 de la tarde mientras que en invierno cierra a las 6:30.

Por la noche nos decantamos por hacer la típica Braai en la terraza de nuestra cabaña, previa visita a las cataratas que iluminan de 7 a 10. La verdad es que la sensación de tirarte en uno de los miradores de la catarata con una cerveza a ver las estrellas con el ruido del agua de fondo…. es de las cosas de las que más he disfrutado de toda la visita, eso junto con la emoción de ver mi primera jirafa.

Al día siguiente tras amanecer en plena naturaleza nos acercamos a desayunar al restaurante y después, tras hacer el “check-out”, momento en el que te dan el justificante indicando que pagaste, para que te dejen salir del parque, nos acercamos a ver las cataratas a la luz del día. La verdad es que el desfiladero es impresionante. Desgraciadamente el invierno es la estación seca por lo que no llevaban mucha agua, aún así no estuvo nada mal.

Después, y ya como despedida, nos decantamos por hacer una caminata por una de las dos sendas que tiene el parque. Nosotros optamos por la larga, según recepción duraba dos horas aunque nosotros la hicimos en una. La verdad es que fue un paseo muy agradable, aunque no se puede decir que el sendero estuviera especialmente cuidado Aunque estaba bien indicado llamaba la atención que transcurriera por en medio de arbustos, tuvieras que esquivar árboles, saltar “ríos”, nada parecido a las sendas europeas! De todas formas disfrutamos mucho.

Os quedan algunas fotos de la experiencia.

Orange Rus

Que haya tantos españoles en Upington tiene muchas ventajas, además de que estamos haciendo de la ciudad una Spanish Colony, podemos beneficiarnos de los conocimientos y la experiencia de la gente que lleva más tiempo aquí.

Precisamente gracias a eso hemos descubierto “Orange Rus” una especie de complejo vacacional que combina hotel, con zona de camping y bar-restaurante. Evidentemente a la zona que más partido le sacamos es a la de bar –restaurante. Supongo que os preguntareis que es lo que nos llama la atención de este sitio entre los muchos que hay parecidos por la zona, pues es la ubicación! Está a 20 Km de la ciudad en dirección Louisvale, justo a la orilla de uno de los brazos del río Orange. Tiene una terraza de vistas espectaculares y es uno de los mejores sitios que he encontrado por el momento para ver una puesta de sol mientras cenas o tomas una cerveza. Os dejo fotos para que podáis valorar vosotros mismos.

La carta es amplia, tienen un poco de todo, desde pizzas, hasta carne pasando por pescado, hamburguesas, etc. De precio no es precisamente de los sitios más baratos de Upington, pero tampoco se puede decir que fuera especialmente caro. No me acuerdo de los precios unitarios, pero una comida de 3 personas con dos platos + 2 entradas+ 3 cafés salimos a unos 150 ZAR por cabeza que vienen a ser unos 11 Eur.

Es importante destacar que son bastante estrictos con los horarios de comida y que al medio día la cocina cierra a las 14:30, más tarde de esa hora te quedas sin comer. 

Koi

Continuando con mi visita a Joburg de hace unas semanas, quiero presentaros uno de los mejores restaurantes que he conocido en este país, se llama Koi y está especializado en comida asiática y pescados. Tiene varios locales tanto en Joburg como en Cape Town, nosotros acudimos al de Sandton.

La decoración del sitio en sí misma llama la atención, a eso hay que sumarle la cantidad de gente “guapa” y con dinero que frecuenta el local. Por ello como vayas a “hora punta” es difícil encontrar mesa sin tener que esperar.

Tienen dos cartas, una de bebidas y otra de comida y tés y la verdad es que cuesta decidirse tanto para las bebidas como para las comidas. 

La carta de bebidas tiene un poco de todo, desde refrescos a cocktails pasando por agua, cerveza y vino. De precio para ser Sudáfrica algo alto pero comparado con la calidad del sitio, en Europa los precios serían mucho más elevados, un cocktail anda por los 42 ZAR, unos 3,5 €.

En relación a la carta de comidas, casi imposible decidirse ente toda la variedad de platos que tienen: ensaladas, carnes, pescados, sushi… y todo con una pinta espectacular. Tras mucho pensar y darle vueltas yo me decanté por el shushi, que me pareció que estaba muy bien de precio, los “california rolls” que traían 8 unidades oscilaban entre los 58 y los 85 ZAR (4,5 y 6,5 Eur), niguiris (2 unidades) entre 35 y 52 ZAR (2,5 y 4 Eur).

Mis compañeros de cena se decantaron por atún con láminas de sésamo (espectacular) 155 ZAR  (unos 11,5 Eur) salmón y pato. La verdad es que es difícil decidir qué estaba más bueno de todo.

La anécdota de la cena fue que coincidimos cenando con los All- Blacks, el equipo de rugby de New Zealand. Fue graciosa la forma que tuvieron de escoger quien de ellos pagaba la cuenta: pusieron todas las tarjetas de crédito en una gorra y la camarera tuvo que sacar una al azar, el "afortunado" invitaba.

Día de la Hispanidad

Cada día tengo más claro que Upington es una pequeña “Spanish colony” y para prueba de ello, solo hace falta bajar un sábado o un domingo por la mañana al “Dross”, en la terraza solo te encuentras mesas de españoles tomando el aperitivo o comiendo.

El sábado pasado aprovechando que era el día de la hispanidad, se organizó una fiesta para Españoles en un Lodge de la zona. Aunque lo cierto es que creo que podíamos estar en la fiesta ¼ de los españoles que hay ahora mismo viviendo en Upington, estuvo muy bien juntarnos para ir conociendo un poco más a la población de expatriados que vive en la ciudad.

La comida aunque no fue especialmente abundante, nada parecido a las bacanales que  se suelen hacer en la mayoría de los casos para este tipo de eventos en España, estaba muy buena, tengo que reconocer que con el sushi me conquistaron, así que no pedía mucho más. Para comer nos pusieron muslos de pollo, tiras de cerdo caramelizadas, sushi, ensalada, cucharitas de gambas con queso cremoso y de postre helado de vainilla con algo parecido a unos churros, nubes de gominola y chocolate fundido. Para las 5:30 de la tarde, de la que tomábamos el postre y algunos el café, ya nos habíamos pasado a las copas y los chupitos.

La fiesta era comida pero también cena, una braai, que preparó la gente del Lodge, y que incluía fillet en abundancia, boerewors y pan de ajo. La verdad es que a esas alturas estábamos más ocupados bailando que prestando atención a la cena, pero aún así no dejábamos pasar una bandeja sin picar un trocito.

Como era de esperar con tantos sevillanos de Abengoa como hay en la zona, no faltaron sevillanas, bailes y hasta una guitarra. Ya a última hora de la tarde, en otra sala, se hizo una pequeña reunión donde la guitarra acompañada de algunas voces se arrancó con bulerías y la gente con algunos bailes, vamos, España en estado puro.

Creo que puede decir que, si bien este es el día de la hispanidad que más lejos he estado de España, ha sido el que más he celebrado.

Para terminar el fin de semana de aire 100% español, nada mejor que una tortilla y un poco de gazpachito para cenar tranquilamente en casa un domingo por la noche.

Que viva España!

Afrikáans Street Style

Después de un par de meses en tierras sudafricanas, creo que ya llegado el momento de enseñaros el “Casual Style” de los Afrikáans para vestir incluso los fines de semana. Por aquí lo llamamos “Farmer Style” y nos tiene a todos descolocados!

El primer fin de semana que salí y me encontré a uno así vestido, reconozco que no podía dejar de mirarlo, no daba crédito!!!!!! En resumen el estilo se suele componer de:

- Pantalones cortos (cuanto más mejor)

- Camisa leñador (preferiblemente abierta hasta el ombligo)

- Botas de seguridad, chanclas o en su defecto ausencia total de zapatos, incluso en los clubs, bares o por la calle

- Gorro de "farmer"

Puntualizar solamente que el modelito vale tanto para verano como para invierno y para un día por semana, o un sábado por la noche.....

Ahí os queda la foto para que podáis opinar, no es la mejor del mundo, está claro que no me voy a ganar la vida como paparazzi.

Tladi Lodge

Esta semana me he enamorado definitivamente. Hace unos días me tocó irme a Joburg a una reunión y esta vez encontramos habitación en el Lodge al que suele ir la gente de la empresa. Como íbamos para una noche, la verdad es que no le pedía demasiado al hotel ni me esperaba gran cosa, cuál fue mi sorpresa cuando llegamos por la noche al Lodge.

Está situado en pleno Standton, en una urbanización de casas bajas y chalets que tienen seguridad privada. El Lodge es todo lo que te esperas de un alojamiento con encanto en Sudáfrica, techos de paja, paredes de barro, muebles rústicos de madera……

El hotel está atendido por un matrimonio, Ian y Sylvia, y la hospitalidad es la marca de la casa, sinceramente te hacen sentir como uno más de la familia, incluso los perros que tienen allí. Como para mí era la primera vez en el hotel me hicieron un tour por el mismo explicándome cómo funcionaba todo. El hotel tiene una casa principal en la que están las habitaciones “standard” y en la que también hay un salón común y un “honesty bar”. El “honesty bar” es un bar en el que no hay camarero sino que hay una hoja en la que apuntas lo que tomas para que después te lo carguen a la habitación.

Después pasaron a enseñarnos las habitaciones. Tuve la suerte de que me tocara una de las habitaciones exteriores que al parecer son las superiores. Son cabañitas unifamiliares con cocina, salón habitación y baño. Todo decorado con mucho gusto y en tonos color terracota, lo que hace que te sientas en medio de la sabana y no en pleno Joburg. El baño era enorme con bañera y ducha. Sinceramente me ganaron con el detalle del albornoz y del bote de jabón Radox especial para liberar tensión, agradecí eternamente el baño relajante cuando llegué al hotel. 

Por la mañana el desayuno insuperable, croissants, muffins, cereales, galletas, fruta, yogur, zumo…. Además cuando llegas te preguntan qué quieres que te preparen (tortilla, revuelto, huevos fritos, bacon, tomate, champiñones, tostadas……..) y te lo hacen sobre la marcha. Además Ian y Sylvia que atienden personalmente el hotel nos contaros cosas sobre el mismo, como por ejemplo, que hace 11 años que lo gestionan o que en sus inicios era una casa particular.

Aunque no pudimos disfrutar de ello el hotel tiene piscina y cancha de tenis. La verdad es que no me lo pensaría dos veces en volver ahí.

De precio, no me pareció excesivamente caro, habitación y desayuno en la cabañita sale por unos 1.180 ZAR que al cambio sale a unos 87 Euros. Al parecer las habitaciones de la casa son algo más asequibles.

Os dejo algunas fotos para que podáis opinar