miércoles, 28 de agosto de 2013

This in not a shop, it's a destination: The Mill



He tenido la suerte de conocer uno de los sitios con más encanto de Upington, se llama de Mill y está un poquito a las afueras. Lo llamo sitio porque es un lugar difícil de definir, es a la vez tienda, taller, restaurante, parque infantil….
 



Sinceramente es un sitio que a primer vista intriga más que atrae. En Sudáfrica es muy común la atesaría con objetos metálicos reciclados, por eso la imagen a primera vista no es la más atractiva del mundo. Para llegar a la entrada tienes que meterte con el coche por una zona de tierra y después a pie cruzar un pequeño riachuelo que tiene un puente de chapa. El recito está rodeado por una alambrada metálica con su correspondiente alambre de espino (en línea con todas las casas unifamiliares de la ciudad). Fuera tiene un pequeño parque infantil y un chamizo con mesas para disfrutar de los días de sol y buena temperatura, pero lo realmente interesante se encuentra dentro de los edificios.  El sitio se compone de dos edificios en los que se exponen diversos objetos de artesanía, supuestamente local, aunque no se parece en nada a la idea que tengo de la artesanía africana. En el tercer edificio se encuentra el taller en el que, principalmente mujeres, elaboran algunas de las piezas que se encuentran a la venta. Se puede encontrar de todo, desde cojines a peluches, cuadros, lámparas, faroles, acuarelas de la sabana africana, té, mermeladas artesanales…..

 



En la nave más grande tuvieron la amabilidad de acondicionarnos unas mesas para que pudiéramos comer. Por regla general si quieres comer allí te sientas en alguna de las mesas que hay fuera, pero claro con los 10 grados que había no estaba como para quedarse al aire libre. De todas formas la diferencia entre la temperatura de dentro y la de fuera tampoco es que fuera mucha.

Para comer, en general aquí las cartas de las cafeterías y restaurantes me recuerdan mucho a los “Eetcafé” de Holanda, abundan los sándwiches, pitas, crepes saladas, ensaladas y quiches, en general comida sencilla pero muy buena.

Os dejo algunas fotos de la visita a the Mill.














jueves, 22 de agosto de 2013

Upington Rugby Klub


 
A falta de nada mejor que hacer nos acercamos hace unos días hasta el Upington Rugby Klub para ver la semifinal del campeonato regional. Si tenemos en cuenta que los deportes más populares del país son el cricket y el rugby, tampoco era mal plan y así vamos integrándonos un poco en las costumbres.
 
El partido, como parece ser todo en este país, acabó siendo entre blancos (equipo local) y gente de color (visitantes). Lo cierto es que aunque no conocíamos muy bien las reglas del juego, más o menos fuimos capaces de ir siguiendo el partido. La entrada al partido era 20ZAR por coche, que básicamente era lo que te cobraban por aparcar. El club de rugby, sencillo, pero con lo básico unas gradas para sentarse y un bar, fundamental estar bien provistos. Además cuando llegamos a la entrada del bar estaban preparando una Braai.
 
A mitad del partido, vimos que la Braai ya estaba operativa y que se podían comprar unos perritos con muuuuuy buena pinta, así que allí nos fuimos de cabeza. La verdad es que por el precio que tenían nos podíamos haber quedado allí comiendo perritos toda la tarde, 10ZAR cada uno (menos de 0,8€) y cada cerveza 12ZAR (unos 0,9€). A medida que el partido avanzaba los visitantes fueron cogiendo ventaja hasta que al final lograron pasar a los locales que había empezado con más fuerza.
 
La verdad es que algunas de las jugadas eran bastante llamativas, especialmente cuando sacaban y se veía como levantaban a jugadores de cada equipo para que cogiera el balón antes que el contrario, o mismamente algunos de los placajes.
 

 
Al final el partido terminó 15 minutos antes de lo debido, ya que los visitantes se retiraron tras una jugada como mínimo polémica que el árbitro no penalizó. La jugada en cuestión consistió en que a uno de los visitantes lo agarraron de la camiseta, lo lanzaron por los aires y se la quitaron (cosa que al parecer está terminantemente prohibida). Así que entre eso y en vistas que iban perdiendo, recogieron las cosas y se fueron. Como era de esperar casi se acaban liando los dos equipos a golpes, árbitro incluido, pero bueno eso son cosas que pasan también en España en el futbol.
 
Algunas cosas para remarcar del partido: la primera que el que vigilaba la banda se paseara por allí con unas zapatillas de leones ¿¿?¿?¿?¿?¿? La otra el buen trabajo del médico que a cada uno que quedaba tirado en el suelo después de una jugada se le acercaba con una bolsa con cuatro hielos contados, y un poco de agua y tras darle de beber y frotarle un poco la parte de turno con el hielo ya lo mandaba a volver a jugar…. Como todos sean así…. Más me vale no ponerme mala!
 

 
Os dejo algunas fotos




martes, 20 de agosto de 2013

Welcome to Joburg (II)

 

 
Retomando la visita a Joburg. Para ser sinceros no hubo mucho tiempo para turismo, pero por lo que me comentaron el “pasatiempo” favorito de los locales es visitar uno de los muchísimos centros comerciales que hay en la ciudad, así que ¿qué mejor forma de integrarse?. Entre los muchos centros comerciales de la ciudad optamos por el más famoso, el Sandton Mall.
Por lo que he podido investigar trata de un centro comercial que fue creciendo por fases, y en la actualidad de compone de cuatro edificios que rodean una plaza (Nelson Mandela Square) en la que hay una estatua enorme de Nelson Mandela. Uno de los laterales del Mandela Square es el hotel “Michelangelo” uno de los más lujosos del mundo y cuya silueta se puede distinguir desde casi cualquier parte de la ciudad.
 
 
El centro comercial se encuentra en el barrio de Sandton y claramente se ve que está pensado para personas de alto poder adquisitivo. La verdad es que no tuve tiempo de explorarlo mucho, pero lo poco que pude ver, es impresionante y muy fácil perderse.
Para cenar no nos complicamos mucho la vida, y optamos por uno de los restaurantes/cafés de la plaza y aunque el restaurante no era nada del otro mundo, la comida estaba buena, especialmente si tenemos en cuenta que no habíamos tenido tiempo de comer. El precio, algo más caro que en Upington, los gnoqui unos 90ZAR (más o menos 7€). Por lo que tengo entendido la forma de mantener a la gente de bajo poder adquisitivo fuera del barrio es que los precios sean superiores que los del resto de la ciudad.
El centro comercial tiene parking, pero teniendo en cuenta que se trata de una ciudad en la que la mayor parte de la gente se desplaza en su propio coche, es algo difícil encontrar sitio para aparcar. Después de dar algunas vueltas lo conseguimos. El parking la verdad es que no fue caro 2 horas 7ZAR (unos 0,55€).
Para dormir nos quedamos en uno de los muchos Lodge del barrio. Sinceramente no tengo muy claro qué diferencia un Lodge de un hotel tradicional, pero si he entendido bien el concepto, los Lodge se organizan alrededor de jardines semitropicales, en ocasiones en cabañas individuales o edificios de dos plantas como máximo. Suelen disponer de menos habitaciones que un hotel tradicional, son más económicos y en teoría son algo más rústicos o tienen más encanto que los otros. Los Lodge son los hoteles que más abundan en Sudáfrica, los hay tanto a modo de hoteles de carretera como en medio de las ciudades o pueblos y reservas. La verdad es que es increíble que en rodeados de edificios existan esos sitios.

 
 
Que tengáis un buen día!

jueves, 15 de agosto de 2013

Welcome to Joburg (I)


Esta semana me ha tocado acercarme a “la gran ciudad”, Johannesburgo, ciudad que, con sus 4,4 millones de habitantes es la mayor del país al menos en población. Está en la provincia de Gauteng, la más poblada del país con 10,4 millones de personas.
 
Por lo que me habían contado, la verdad es que no parecía una ciudad demasiado atractiva, tanto por la inseguridad como por la descripción que me habían dado, de ahí mi reticencia a visitarla, pero bueno, los negocios son los negocios y no me tocó otra que cogerme un avión y acercarme hasta allá.
 
El viaje ya empezó mal desde el momento en el que ví el avión en la pista del aeropuerto, un avión de hélices tan pequeño que no tenías ni para subir el bolso a la cabina (solo podías dejarlo en el suelo). Mi experiencia previa con el avión de hélices había dejado bastante que desear de ahí que no me entusiasmara la idea de subirme a ese avioncito de juguete. Para que os podáis hacer una idea del tamaño del avión os diré que casi no te entraba el culo en el asiento y que podía transportar un máximo de 39 pasajeros… Os dejo una foto que aunque no se ve muy bien se puede uno hacer una idea. Tengo que reconocer que el vuelo fue muy bien, sin turbulencias y en 1,5 horas estábamos aterrizando en O.R. Tambo, el aeropuerto internacional de Johannesburgo.
 
Durante el camino me estuvieron explicando algunas cosas de la ciudad. Una de ellas, para ser sincera la que más me llamó la atención, fue que, tras la caída del Apartheid, se permitió a las personas de raza negra habitar en cualquiera de los barrios de la ciudad por lo que el centro se colapsó y la criminalidad aumentó muchísimo, es por eso que ahora el centro financiero de la misma se ha trasladado al norte, al barrio de Sandton, al que también se ha trasladado la minoría blanca.
 
De todas formas, como siempre dicen, lo mejor es empezar por el principio. Para desplazarnos del aeropuerto al centro utilizamos el Gautrain, una especie de tren de alta velocidad construido recientemente y que une el aeropuerto con Sandton (haciendo alguna parada intermedia). Se trata de un tren que suele utilizar gente de un nivel económico elevado y turistas por lo que es un tren muy seguro (nunca había visto tanta seguridad privada en un mismo tren/estación!) y con reglas estrictas, no comer chicle, tener buena apariencia… cosa que no sucede con el resto del transporte público de la ciudad que deja mucho que desear. El trayecto cuesta 125ZAR que equivale a unos 9,5€ y tarda unos 15-20 minutos en llegar al centro (Sandton). Para comprar el billete puedes optar por la taquilla o una máquina de venta automática. La mejor opción es comprar una tarjeta “Gautrain Gold” en la que puedes cargar dinero y vas gastando a medida que lo necesites. La tarjeta cuesta 12 ZAR, algo menos de 1€. Además es un tren que utiliza mucha gente para ir a trabajar por lo que hay abonos o “tarifas planas” por días y eso hace que salga mucho más económico.
 
La primera imagen de Joburg es la estación del Gautrain que está en el centro de Sandton, y según sales de la misma podrías encontrarte en el centro financiero de cualquier ciudad europea, os dejó otra foto. 
 
La imagen que me ha transmitido Joburg es la de una ciudad de contrastes. Para empezar entre los barrios: el “Soweto” lleno de chabolas metálicas y con población eminentemente de color, Sandton lleno edificios modernos y con población principalmente blanca. Dentro de Sandton también hay bastantes contrastes, para empezar te encuentras urbanizaciones de chalets con jardín entre los edificios de oficinas, centros comerciales y parque empresariales. Los parques empresariales, nada parecido a España, parecen hoteles de lujo o residencias particulares.
 
Es raro ver a la gente caminando por la calle, y los pocos que ves son gente principalmente de color que solo trabaja allí, pero vive en alguno de los poblados de las afueras, sin embargo abunda el alambre de espino, las vallas electrificadas y los muros altísimos cerrando hoteles, parques empresariales y urbanizaciones.
 
Bueno, creo que eso va a ser todo por hoy.
 
Os dejó algunas fotos, además de las que os decía anteriormente del avión y de la estación del Gautrain, os dejo otra de uno de los muchos parque empresariales que había por la zona.
 
 
 
 

domingo, 11 de agosto de 2013

Driving on the left side


Después de casi una semana en Sudáfrica, me he animado a cogerme un coche!!! Aquí se conduce por la izquierda por eso me ha costado un poco decidirme a conducir. Antes de venir investigué por internet y me enteré de que para conducir en Sudáfrica es necesario tener el carnet de conducir internacional. Conseguirlo es muy fácil, solo tienes que ir a la oficina de tráfico junto con los formularios que te puedes bajar de internet, una foto de carnet y fotocopias del DNI y del carnet de conducir (ambas por las dos caras). La tasa son casi 10€ que se abonan allí con tarjeta. En el mismo momento te llevas el nuevo carnet, que es un librito casi casi del mismo tamaño que el pasaporte. El permiso está vigente durante un año y no es válido en España. Si os soy sincera, cuando fui a buscar el coche de alquiler ni me pidieron el carnet de conducir internacional, con el de España, fue suficiente, de todas formas nunca está de más tenerlo.

El coche es un Ford Figo, un modelo que no vende en España. Es un coche chiquitito y discreto, que creo que me acompañará durante unas semanas hasta que me entreguen el coche definitivo. Es este país es mejor llevar coches pequeños y poco llamativos para evitar "tentaciones". Por lo que podido ver en estos días, en Sudáfrica se venden muchos modelos de coche que en Europa no se comercializan. En general por la ciudad abundan los 4x4 y las furgonetas de los "farmers"(los Afrikáners) que viven en granjas a las afueras. Como ya he comentado aquí se conduce por la izquierda por lo que el coche tiene el volante en la derecha y la palanca de cambios a la izquierda, vamos un coche inglés de los de toda la vida. Siempre me ha dado un poco de respeto lo de conducir por la izquierda pero, ya que aquí necesito desplazarme, no he tenido más remedio que armarme de valor y ponerme a ello.

Reconoceré que empecé con mal pie intentando subirme al coche por la izquierda, pero bueno son cosas que pasan, somos animales de costumbres..... no? Una vez superado ese pequeño "problemilla", no ha resultado tan difícil como esperaba. Tienes que ir mucho más concentrado que otras veces y en cada giro acordarte que tienes que ir "por la izquierdita, por la izquierdita" como decimos por aquí. Lo bueno es que Upington es una ciudad pequeña que tampoco tiene demasiado tráfico y solo tiene una rotonda, porque lo de hacer las rotondas en el sentido de las agujas del reloj también es para echarle de comer a parte......  

Los cruces de las calles también es algo que me ha llamado mucho la atención. En general los cruces se regulan mediante cuatro "stops". Hay un "stop" en cada una de las direcciones y la preferencia la tiene el primero que llega y así sucesivamente, el concepto "ceda el paso" no está muy extendido que digamos .....

Destacar otra cosa que me ha llamado la atención del coche, en los retrovisores pone escrito "Objetcs in mirror are closer than they appear" (Los objetos en el espejo están más cerca de lo que parecen), está bien saberlo ;)

Os dejo algunas fotos del coche y del recorrido por la ciudad.

Buena tarde!






miércoles, 7 de agosto de 2013

Vuelo Airlink 8769: Destination Upington





Hoy hace tres días que he aterrizado en Upington una pequeña ciudad sudafricana cerca de la frontera con Namibia en la que pasaré los próximos 3 años.

Como muchos españoles hoy día, soy una de esas personas que actualmente está desplazada trabajando en un país extranjero. Hace poco más de un mes que me dieron la noticia de mi traslado y la primera pregunta que me hice es ¿Cómo sobrevivir en Sudáfrica?

Por el momento no ha habido tiempo de explorar mucho ni la ciudad ni el entorno ni de pensar en la supervivencia más allá de los preparativos previos al viaje. Upington es una pequeña ciudad a orillas del río Orange, que cuenta con una población de unos 70.000 habitantes y de la que sabía bien poco antes de venir.

Lo primero antes de venir algún país como este, es acudir al centro de vacunación internacional de la ciudad. En mi caso acudí al de Gijón, que está situado en el puerto deportivo. Es importante llamar para pedir cita con la mayor anticipación posible ya que en la actualidad no hay citas hasta dentro de un mes y medio. Para venir a Sudáfrica solo es necesario una vacuna para la Hepatitis A, siempre que no cruces ninguno de los países en los que la fiebre amarilla es endémica ya que para entrar en Sudáfrica necesitas un certificado de haberte vacunado al menos 5 meses antes. Además, en el caso de que quieras visitar la zona del Parque Kruger tienes que tomar pastillas contra el paludismo.

Lo siguiente que me planteé es ¿qué ropa llevo? No suelo ser una persona que viaje con mucha ropa, pero en principio hice la maleta con la intención de no tener que traer más ropa en tres años, con el inconveniente de que encima en Sudáfrica ahora mismo estamos en pleno invierno!!

Upington es una ciudad que no tiene un clima demasiado extremo, aún así por las mañanas hay unos 3-4 grados mientras que cuando pega el sol llegamos a los 22. Básicamente con un buen abrigo y ropa de entretiempo para el resto del día, se aguanta bien. Siguiente problema.... ¿qué ropa para el verano? El clima en verano es totalmente desértico, para eso la ciudad está rodeada por el mismo......, la solución por el momento ha sido algún vestido, un pantalón corto, unas sandalias y algunas camisetas, veremos como sobrevivimos al calor en diciembre.

Antes de venir, me compré la guía trotamundos de Sudáfrica. Técnicamente es de Sudáfrica, Suazilandia, Namibia y el Delta del Okavango. Desde mi punto de vista es la mejor guía de viajes, al menos me ha dado muy buenos resultados en Europa, veremos qué tal me prueba por aquí. De camino para aquí, leí que lo más típico en este país son las "braai", las típicas barbacoas para el resto del mundo y parrilladas en Asturias. 

En general la mayoría de la casas de campo sudafricanas tienen un lugar acondicionado para las preparar y comer las "braai" ya que es la actividad de ocio preferida entre los Afrikaners, especialmente si ponen en la tele un buen partido de fútbol o cricket, se nota la herencia inglesa. Siendo tan típicas las "braai" por la zona  ¿de qué otra forma celebrar mi bienvenida a este país que con unos cuantos españoles, buena carne y una buena "braai"?. 

Buenas noches!