El viernes pasado en Sudáfrica era el Casual Day, según el lema “bring the bling” tenías que llevar a la oficina algo brillante, como sobreros de lentejuelas, gorritos, camisetas….. Nosotros aplicamos nuestras propias reglas y con traer algo gracioso servía, sino multa de 100 manedillas!
La idea era concienciar sobre los niños discapacitados y a la vez recaudar fondos comprando unas pegatinas que vendían en la mayor parte de las tiendas por 10 ZAR.
Nosotros, como era de esperar nos sumamos a la iniciativa de forma entusiasta, no hace falta insistir mucho para que hagamos un poco el tonto así que ni tontos ni perezosos sacamos “nuestras mejores galas” y nos plantamos en la oficina con esta pinta.
Cómo podéis ver, cualquier excusa es buena para reírnos un rato y pasárnoslo bien, incluso tan lejos de casa, y es que son estas pequeñas cosas las que nos hacen aguantar el tirón!
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