Hace unas semanas volví a mi adorada Knysna y como cada vez que voy, descubrí algo nuevo. En esta ocasión fue un espectacular mirador en lo alto de las Knysna Heads, las montañas que se encuentran a la salida de la bahía.
Hacía tiempo que me habían hablado del sitio, pero hasta ahora no me había animado a subir porque creí que había que subir caminando (en algún momento me dijeron algo de unas escaleras) y aunque imaginaba la vista desde lo alto merecía la pena, me daba bastante pereza.
Esta vez pensaba tirarlo todo por la borda y subir aunque tuviera que morir en el intento. Cuál fue mi sorpresa cuando descubría que se puede subir en coche! Así que para allá nos encaminamos como unos marqueses.
La subida es un poquito estrecha, especialmente si conduces un monstruo como el nuestro. Afortunadamente, solo me encontré con otros coches en áreas más amplias lo que facilitó mucho el tema.
Las vistas desde lo alto, eran lo que prometía, especialmente porque tuvimos un día soleado, aunque un poco frío lo que permitía a la laguna de Knysna brillar en todo su esplendor.
La zona tiene también un segundo mirador con vistas al mar
Sin lugar a dudas una parada fija si estás de paso por Knysna, algunos disfrutaron como enanos
Todos lo pasamos genial!
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